El curador de contenidos es un intermediario del conocimiento y la información. Por lo tanto, son bibliotecarios cuya tarea consiste entre otras cosas en ser productores de contenidos. Para ello hacen uso de las herramientas desarrolladas en la web social y deambulan entre la web 2.0 y la web 3.0. Entonces, a modo de resumen, un content curator es el profesional de la información, que se ha formado en un área concreta del conocimiento, específica, que domina los recursos de información existentes en cualquiera de sus formatos, manifestaciones, etc., que domina tambien las tecnologías de la información, las redes sociales, y hace uso de ellas, así como de las herramientas de monitorización y marketing social, y que es capaz de filtrar la información necesaria para el usuario y ofrecerla en el lugar y momento.
En este curso los participantes aprenderán los principios y técnicas básicas de restauración. Además, el alumnos, aprenderá a reconocer los diferentes tipos de encuadernación, así como los materiales originales que fueron utilizados, ya que la restauración consiste en otorgar al bien reparado el mismo aspecto que tuvo en sus orígenes. Para ello, es necesario tener conocimientos sobre papeles, tintas, colas, hilos, etc. También, es fundamental trabajar en equipo de manera interdisciplinaria con colegas de otras áreas del conocimiento.
La archivología es una ciencia emergente que se ocupa de la organización, almacenamiento, ingreso y recuperación de información. El material de archivo necesita de un cuidado diferente al de una biblioteca. En este curso se intentará impartir a los bibliotecarios algunas nociones básicas y algunas más avanzadas sobre la normativa que rigen a los archivos, así como la forma adecuada de ingresar el material.
¿Para qué sirve una biblioteca o archivo? Una unidad de información puede ofrecer distintos tipos de servicios y tener múltiples propósitos. Conocer las posibilidades de lo que se puede hacer permite tomar mejores decisiones a la hora de planificar o mejorar un servicio.
A su vez, los cambios tecnológicos y comunicacionales obligan a los servicios a reinventarse para atender nuevas necesidades, retener a sus usuarios reales, fidelizarlos e invitar a los potenciales.
El curso pretende movilizar ideas, repensar las bases y mostrar las herramientas para armar una Unidad Informativa útil.
En el siglo XXI asociar la biblioteca a un espacio silencioso lleno de libros está de modé. Las unidades de información están cambiando, pero sus objetivos y roles sociales son los mismos: elevar el nivel cultural de quienes las consultan.. Los cambios en las formas de comunicar e informar obligan a la biblioteca a buscar nuevas maneras de atraer a los usuarios, de comprometerse con su comunidad, de hacerlos ser parte de la biblioteca, de sentirla propia, defenderla, de evitar el aislamiento y posterior cierre. La extensión cultural es, en estos momentos quizás mucho más que en ningún otro, la herramienta esencial para construir vínculos con el usuario. Los bibliotecarios en su formación tienen un gran bache relacionado a la organización de eventos: presentaciones de libros, conferencias, foros de discusión, cine debate, proyecciones de todo tipo, muestras artísticas, celebraciones comunitarias. El curso pretende dar buenas ideas sobre qué se puede hacer con la extensión cultural y dar herramientas sobre cómo llevarlo a cabo.
La planificación eficaz de la comunicación interna permite alcanzar los objetivos, optimizar recursos y mostrar resultados. Es la manera más eficaz de que el personal conozca todas las novedades y cambios operativos que permiten conseguir una gestión eficaz de la Unidad de Información.
La formación de equipos de trabajo es una tarea de suma importancia, que debe basarse en conocimientos específicos sobre organización, motivación, liderazgo y manejo de conflictos, entre otros; asegurándonos así el mejor desempeño posible.
Las Unidades de Información están insertas en un mundo globalizado y competitivo. Cuándo hablamos de competitividad no necesariamente nos referimos a otras Unidades de Información. Es necesario, entonces, que los profesionales adquieran y manejen de manera correcta algunas técnicas de negociación que les permitirán solucionar problemas internos y externos, todos relacionados con la gestión eficaz de la Unidad de Información.
El Programa de Actualización se centrará en la transferencia del conocimiento entre los integrantes de una Unidad de Información, de modo que este conocimiento constituya un recurso disponible para todos aquellos que desempeñan sus funciones en esa Institución.
El cambio drástico y estructural que se ha producido en la información, en especial en la forma como se almacena, comunica y distribuye la información trae nuevos conceptos en la estructura para registrar y almacenar datos bibliográficos.
El Joint Steering Comité For Revision of AACR (JSC), en mayo de 2002 comenzó el diseño de la nueva edición de la AACR. Este comité decidió cambiar el nombre, estructura y formato de las reglas, ahora se denominan RDA (Resource Description and Access). Por lo tanto estas nuevas reglas se basan en las AACR por lo que los registros son compatibles con aquellos que fueron creados bajo la antigua norma