Resiliencia en el trabajo

La resiliencia es la capacidad que tienen las personas para recuperarse cuando pasan por períodos de dolor emocional así como situaciones adversas. Por lo general las personas salen de este momento muy fortalecidas.

Las personas resilientes tienen algunas actitudes que los caracterizan como una alta autoestima, están convencidos de lo que hacen, son positivos y se adaptan con facilidad a los cambios.

Los ambientes laborales generalmente son estresantes, relaciones interpersonales conflictivas, exigencias y presiones, siempre hay que cumplir con plazos para alcanzar una meta y claro está, siempre hay que competir y demostrar que somos altamente efectivos.

Algunas situaciones conflictivas en el trabajo pueden afectar de manera traumática a una persona y sus reacciones pueden ser diversas. Algunos superan estos problemas con rapidez, en cambio otros no lo logran y se estancan en ese momento sin poder superarlo. Las personas que  reaccionan con rapidez y aprenden de los problemas enfrentando las adversidades son verdaderos resilientes.

Si nos fortalecemos y somos resilientes podremos superar los desafíos con naturalidad, adaptándonos mejor a los cambios o a las situaciones negativas en nuestro trabajo, pero sobre todo, cada una de estas experiencias nos dejará una enseñanza que podremos aprovechar en otra oportunidad.

Los empleados resilientes generan un buen clima laboral, que favorece la actividad que se realiza en el trabajo.

Creemos que hay algunos puntos que destacan para que una organización favorezca la resiliencia entre sus empleados:

  • Fijar objetivos alcanzables que favorezcan la autoestima del personal
  • El intercambio cara a cara entre los empleados de manera no conflictiva
  • Emplear políticas consensuadas entre todo el personal
  • Lograr que todos los empleados participen en la toma de decisiones
  • Promover situaciones de afecto entre sus colaboradores
  • Se fomenta el aprendizaje colaborativo

Los desafíos que los lugares de trabajo proponen en la actualidad suelen provocar mucha tensión entre los empleados y suelen bajar la productividad de los mismos, por eso, lo más inteligente, es que las organizaciones ayuden a  sus empleados a superar estos problemas por medio de una capacitación adecuada que lime sus temores y los convierta en resilientes.