“Imposible” es sólo una palabra que usan los hombres débiles para vivir fácilmente en el mundo que se les dio, sin atreverse a explorar el poder que tienen para cambiarlo. “Imposible” no es un hecho, es una opinión. “Imposible” no es una declaración, es un reto. “Imposible” es potencial. “Imposible” es Temporal, “Imposible” no es nada”.

Muhammad Ali

Muchas veces el miedo nos inmoviliza, tenemos miedo de este mundo que ha cambiado tanto desde el día que nacimos. Un mundo en el que los niños de corta edad son amantes de las pantallas y de los contenidos a los que acceden por medio de ellas, un mundo que a veces nos resulta extraño y difícil, ya que nos vamos excluyendo de él.

Sin embargo, este mundo nos pertenece; y en parte ha evolucionado de acuerdo a los parámetros que nosotros mismos le hemos impuesto.

Todos podemos aprender y llegar a manejar las tecnologías de una manera óptima, casi tan bien como los niños y adolescentes.

Realmente, nada es imposible, solo es cuestión de intentarlo, a veces va a salir mal, tendremos mejor suerte en el próximo intento, pero si no hacemos nada, simplemente perderemos la oportunidad de desarrollarnos y crecer profesionalmente y personalmente.

Es fácil juzgar y criticar a los demás cuando fallan ya que no se ha arriesgado nada, no obstante, resulta muy gratificante después de habernos arriesgado obtener una recompensa.

El miedo, la incertidumbre, son las causas que no nos permiten avanzar y alcanzar nuestras metas. Tenemos que vencer la incertidumbre y arriesgarnos, sin temor a fracasar. En realidad, al igual que en nuestra época de estudiantes, son los errores los que nos enseñan y nos fortalecen. Un profesional que tuvo algún obstáculo en su vida estudiantil terminó aprendiendo más que aquel que jamás fue reprobado, eso es porque de alguna manera se prepara para los problemas que deba enfrentar en su vida profesional. Alguien que ya ha experimentado el fracaso, no le teme, lo respeta, aprende y sigue adelante con más ganas y con una nueva visión.

Un profesional sabe que muchas veces las cosas no son perfectas; que todo lo que aprendió a veces en el mercado laboral son impracticables, por eso, muchas veces en el trabajo hay que innovar, hacer muchas cosas con un bajo presupuesto, y aún así ser efectivo.

Todo lo que nos proponemos hacer es factible, solo que tenemos que entender que las cosas no suceden porque sí, se obtienen después de haber trabajado muy duro, de dedicarle muchas horas de esfuerzo, de perfeccionamiento e indudablemente, de sacrificio.

Nada es imposible, el límite somos nosotros mismos y nuestra fuerza de voluntad.